mira a través de los ojos

mira a través de los ojos

sábado, 14 de abril de 2018

En mi individualidad supe hacerte un hueco.
Ni tú sabes bien cómo, pero entraste en ese espacio llamado “autosuficiencia”.
Resultó que contigo me sentía más autosuficiente que nunca.
Mi obsesión por salvar almas hizo una circunferencia en ti, y todo cambió.
Cambió el nombre de los días de la semana:
El fin de semana tuvo tu nombre.
El domingo de repente era cosa de dos.
Una delgada línea llamada “no sé qué pasa, pero yo no me muevo” gobernó nuestro espacio.
De repente el tiempo empezó correr: no habían pasado horas;
fueron meses pendiendo/perdiendo de esa delgada línea.
Y joder qué putada.
Y qué pérdida de tiempo.
Y cuántas cosasquenosoncosas perdidas por no moverme de ese lugar.
Y joder qué rencor.
Y qué coño hago yo ahora,
[no echándote en cara para que no sepas]
que lo que nunca te perdonaré,
es que no hayas sido capaz de ser más valiente que yo.